El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado un paquete de 12 medidas históricas para combatir la crisis inmobiliaria que afecta a España. Durante su intervención, Sánchez destacó que el objetivo principal es garantizar más viviendas, mejor regulación y mayores ayudas, atacando de raíz las desigualdades que el mercado inmobiliario actual está generando en el país.
“Nos enfrentamos a un desafío decisivo: no convertirnos en una sociedad dividida entre propietarios ricos e inquilinos pobres,” señaló Sánchez en su discurso, subrayando la urgencia de actuar frente al encarecimiento del precio de la vivienda, que en la última década ha aumentado un 48% en Europa, mientras los ingresos de los hogares han crecido la mitad.
Las medidas clave del plan
- Restricción a la compra de viviendas por extracomunitarios no residentes:
Esta medida, acompañada de un gravamen fiscal del 100%, busca frenar la especulación inmobiliaria por parte de ciudadanos de fuera de la Unión Europea. En el caso de Canarias, donde el 28,5% de las compraventas de viviendas en 2023 fueron realizadas por extranjeros, esta iniciativa podría tener un impacto significativo.Con la salida del Reino Unido de la UE, los británicos, que tradicionalmente han sido una de las principales comunidades compradoras en las islas, serán los más afectados por esta regulación. Sánchez destacó que esta decisión busca “priorizar a los residentes y garantizar que puedan acceder a una vivienda en condiciones justas.”
- Creación de una Empresa Pública Estatal de Vivienda:
Más de 30.000 viviendas de la Sareb y dos millones de metros cuadrados de suelo residencial serán transferidos a esta nueva entidad para garantizar alquileres asequibles, especialmente para jóvenes y familias vulnerables. - Eliminación de las Golden Visa:
Estas visas, que permitían la residencia a millonarios extranjeros a cambio de inversiones inmobiliarias, serán eliminadas. Según Sánchez, esta política fomentó “la especulación y el uso de la vivienda como activo financiero en lugar de como un derecho básico.” - Sistema de garantías públicas:
Inspirado en el modelo francés, protegerá a propietarios e inquilinos, incentivando el alquiler asequible. Se implementará inicialmente para menores de 35 años. - Incentivos para movilizar viviendas vacías:
Un programa de rehabilitación de inmuebles vacíos ofrecerá ayudas a los propietarios que reformen sus propiedades y las destinen al alquiler a precios asequibles por un mínimo de cinco años. - Exenciones fiscales:
Los propietarios que alquilen según el Índice de Precios de Referencia tendrán una exención del 100% en el IRPF, incluso fuera de zonas tensionadas.
Impacto en Canarias y Fuerteventura
En Canarias, donde el turismo y la alta demanda externa han disparado los precios de la vivienda, estas medidas podrían aliviar la presión sobre el mercado. En particular, la restricción a la compra por parte de extracomunitarios afectará principalmente a los británicos, que representan una de las comunidades extranjeras más activas en la adquisición de inmuebles, especialmente en Fuerteventura.
“La vivienda no puede ser un activo financiero en manos de especuladores. Debemos garantizar que las familias trabajadoras puedan acceder a una vivienda digna,” enfatizó Sánchez, en referencia al uso turístico y especulativo de las propiedades.
Sin embargo, expertos locales advierten que la efectividad de estas medidas dependerá de su implementación. Destacan la necesidad de combinar estas iniciativas con una mayor regulación de los alquileres vacacionales, otra de las principales causas del encarecimiento de los precios en la región.
El plan presentado por el Gobierno marca un hito en la política de vivienda en España. Con medidas ambiciosas y un enfoque en limitar la especulación, el Ejecutivo busca corregir décadas de desatención al mercado inmobiliario. Sin embargo, queda por ver si las iniciativas tendrán el impacto esperado, especialmente en territorios como Canarias, donde los retos del acceso a la vivienda son más pronunciados debido a la presión turística y extranjera.
