El proyecto, organizado por el Cabildo de Fuerteventura en colaboración con el Servicio Canario de Empleo, trata de mejorar las condiciones laborales y formativas de los participantes, a la vez que tiene por objeto la restauración del daño medioambiental a través de diferentes acciones.
En este sentido, la recogida de residuos marinos en puntos de especial vulnerabilidad en la Isla, se ha desarrollado según la metodología marcada por las Estrategias Marinas Españolas del Ministerio de Transición Ecológica y Reto demográfico, con la finalidad de encontrar las posibles fuentes de origen de los residuos y realizar un trabajo y reflexión sobre las posibilidades de minimizar el impacto.
La acción de limpieza y recogida de residuos se llevó a cabo por las zonas norte y sur de la isla majorera, haciendo especial hincapié en las zonas con mayor llegada de residuos marinos, a la vez que los puntos más alejados y de más difícil recogida.
De los vertidos registrados en las costas majoreras, los participantes explican que casi el 75% de los mismos correspondían a residuos de origen plástico, concretamente al de un solo uso, “como son los envases de comida y cosméticos junto a las tapas, tapones y botellas de bebida”.
Del mismo modo, del total de desechos incautados destacan “el porcentaje de residuos metálicos encontrados cerca de las playas, cómo son partes de vehículos, somier de colchones, hamacas e incluso electrodomésticos”, según las personas participantes.
En este punto, desde el área de sostenibilidad ambiental del Cabildo, se fomenta la importancia de utilizar los gestores de vertidos adecuados para cada uno de los residuos mencionados, como son los puntos limpios para la recogida de electrodomésticos en el hogar.
