Se desarrolla cada año desde septiembre hasta finales de noviembre
Alrededor de 170 pardelas han sido rescatadas y liberadas hasta ahora por la Consejería de Sostenibilidad Medioambiental del Cabildo de Fuerteventura en la presente campaña de protección de la pardela cenicienta (Calonectris diomedea borealis) de 2022. Estos ejemplares han sido recuperados gracias a la colaboración ciudadana e institucional, la mayor parte de ellos en el norte de la Isla.
En la mañana de este martes, día 8 de noviembre, escolares del IES San Diego de Alcalá participaron en la suelta de seis de estos ejemplares de pardela cenicienta, en el marco del programa de educación ambiental de la Consejería de Sostenibilidad Medioambiental, ‘Conocer para Proteger’. La actividad se enmarcó dentro de ‘De Vuelta a Casa’, un proyecto que persigue concienciar a los jóvenes sobre la protección de la naturaleza.
En la suelta de pardelas estuvieron presentes la consejera de Sostenibilidad Medioambiental, Lola García, y el consejero de Gestión Medioambiental, Pedro Martínez.
Para la consejera insular, Lola García, la educación ambiental es de vital importancia como estrategia pedagógica que permite dar a conocer y sensibilizar sobre la preservación de las especies animales y vegetales que habitan en Fuerteventura. “Para la protección de la pardela cenicienta es fundamental la colaboración de la ciudadanía, siendo preciso avisar al 112 en el caso de encontrar una pardela. Además de todo esto, es necesaria la coordinación entre administraciones, asociaciones y centros turísticos”.
La Campaña de Protección de la Pardela Cenicienta se desarrolla cada año desde septiembre hasta finales de noviembre. Se trata de los meses más críticos para la especie, ya que es el momento en el que los pollos abandonan el nido para realizar su primer vuelo. Ese primer vuelo lo suelen hacer de noche y se sienten atraídos por puntos de luz, chocando con diferentes estructuras. Aunque aparentemente no han sufrido heridas, no son capaces de levantar el vuelo por sí solas y precisan de ayuda para hacerlo.
A la hora de llamar al 112 ante cualquier hallazgo, es preciso facilitar la mayor información posible sobre el lugar exacto y las circunstancias del mismo. Esta información es verdaderamente útil para gestionar la recogida de las pardelas, tratamiento de datos y puesta en libertad en una zona segura próxima al lugar de procedencia del animal.
Existe un protocolo de actuación que el ciudadano debe seguir. En primer lugar, aunque se observe que el ave se encuentra en buen estado, no se debe proceder a su liberación. En segundo lugar, atender al animal, recogiéndolo con mucho cuidado y prestando atención a su pico. Para ello, el ciudadano o ciudadana puede valerse de una toalla, sudadera o similar. A continuación, es necesario depositar el ave en una caja con ventilación, para que pueda respirar y retirar el objeto utilizado. Posteriormente, cierre la caja y mantenga al animal en un lugar tranquilo y a la sombra, hasta que pase el servicio de recogida de fauna. Se debe evitar suministrarle ningún tipo de alimento sólido o líquido.
A partir de aquí, debemos dar aviso al 112 y, si es posible, trasladar al animal a alguno de los puntos de recogida siguientes: guardia civil, policía local, bomberos, protección civil, Cruz Roja, Cabildo de Fuerteventura.
En caso de encontrarse una pardela sin vida, también es importante indicar el punto en el que se encuentra, para detectar posibles zonas de mayor siniestralidad.
La pardela cenicienta es un ave marina de gran tamaño, llegando a alcanzar los 50 centímetros de cabeza a cola. Este animal vive en mar abierto y toca tierra únicamente para reproducirse. Su pico es amarillo con la punta negra, los colores de las plumas en la parte dorsal son grises o pardas y en la parte ventral blancas.