Creo, y ya es raro que recurra a la primera persona, que la única forma de comenzar este artículo es con una invitación. Una invitación para que visiten la nueva exposición que llena las paredes del Centro de Arte Juan Ismael, en Puerto del Rosario.
Se trata de una muestra organizada por el Gobierno de Canarias con casi 80 obras del pintor tardobarroco canario Juan de Miranda. Es muy posible que les ocurra lo mismo que me pasó a mí, y es que en medio de una producción artística de semejante calibre surje la siguiente pregunta: ¿cómo es posible que no hubiera oído hablar de Juan de Miranda?
La comisaria de la exposición y experta en el artista, Margarita Rodríguez, cuenta en El Palique cómo se ha configurado la muestra, que ya ha pasado por Madrid y Tenerife. La exposición es una reivindicación clara no sólo de la importancia de la figura de Miranda sino del papel que ha representado Canarias en el arte. Y sólo por eso ya merece la pena la visita.
Además, Rodríguez desvela algunos entresijos de la vida del artista, que debió ser todo un personaje de la época. Valga decir que fue condenado por amancebamiento y que se le dio la posibilidad de evitar la pena si se casaba. Qué clase de castigo podía ser para Miranda el matrimonio que optó por la condena que lo llevó a ser expulsado de las islas. Lejos de poder saber los motivos del artista, lo que sí se puede afirar es que fue esa decisión la que probablemente marcó el inicio de la trayectoria que reverenciamos hoy, 300 años después.
Porque si no hubiera rechazado casarse no lo habrían embarcado y no hubiera comenzado su periplo fuera del Archipiélago. Y probablemente no hubiera entrado en contacto con personajes ilustres ni con nuevas corrientes, ni vuelto a las islas con ideas frescas, ni renovado el arte que se hacía en Canarias… Efecto mariposa del s. XVIII.
En fin, Margarita Rodríguez es catedrática en Historia del Arte. Ella cuenta mucho mejor que yo la vida y obra de este grande de nuestro arte. Así que invito, además de a la visita de la exposición -disponible hasta el 24 de agosto en el CAJI- a que escuchen la entrevista que la catedrática ha concedido a El Palique. Descubrirán un personaje con mayúsculas cuya vida resulta casi tan fascinante de conocer como su obra de descubrir.