Canarias podrá inyectar cerca de 2.000 millones de euros de la Reserva de Inversiones de Canarias (RIC) en la construcción, adquisición y rehabilitación de viviendas destinadas al alquiler residencial, tras la aprobación definitiva de la reforma en el Congreso de los Diputados. La iniciativa, que salió adelante con 299 votos a favor, 37 en contra y 6 abstenciones, permite que uno de los instrumentos fiscales más potentes del Archipiélago se oriente directamente a aumentar la oferta de alquiler de larga duración y a moderar los precios.
El nuevo uso de la RIC podría traducirse en la incorporación de varios miles de viviendas al parque residencial en un plazo de dos a tres años, según estimaciones de los propios grupos impulsores de la medida. Solo a través de la bolsa de suelos ya disponible y del parque procedente de la SAREB, se prevé sumar más de 30.000 viviendas de uso residencial en toda España, buena parte de ellas en Canarias.
Alicia Álvarez, portavoz adjunta de Hacienda y diputada por Santa Cruz de Tenerife, recordó que la bolsa de recursos disponibles a través de la RIC ronda actualmente los 2.000 millones de euros sin materializar: “Con esta reforma Canarias tiene una oportunidad real de activar estos fondos y destinarlos a lo que más urge: vivienda asequible para los residentes”, afirmó.
La parlamentaria subrayó que, a finales de 2024, ya se modificó la norma para facilitar que la RIC se usara en vivienda protegida, pero ahora se amplía a todo el alquiler de uso residencial —excluida expresamente la vivienda vacacional—, abriendo la puerta a proyectos de construcción, rehabilitación o compra de inmuebles para ponerlos en alquiler a precios más razonables.
La reforma se suma al plan estatal que prevé movilizar una empresa pública de vivienda con 3.300 unidades ya transferidas y casi 2 millones de metros cuadrados para edificar más de 20.000 nuevas viviendas protegidas. Todo ello busca aliviar un mercado tensionado, donde el déficit estructural de vivienda asequible afecta a miles de familias.
“Es una apuesta por la generación de empleo y la dinamización de la economía canaria, pero sobre todo por dar un respiro a los ciudadanos que no pueden acceder a una vivienda digna”, defendió Álvarez.




