Más de 630.000 personas viven en situación de exclusión en Canarias y sólo el 15 por ciento de ellas percibe el ingreso mínimo vital, lo que para Cáritas supone una emergencia social “que abre las carnes” y supone un tirón de orejas a las administraciones públicas para que se pongan las pilas.
El dato procede del Informe Foessa sobre Exclusión y Desarrollo Social que en esta ocasión se ha adelantado al previsto para 2024 con el objetivo de analizar el impacto de la covid-19 en la sociedad isleña, y que ha sido presentado hoy por los obispos de Canarias y Tenerife, José Mazuelas y Bernardo Álvarez, respectivamente.
Y la covid-19 ha impactado en la sociedad canaria como un “Titanic” que ha golpeado a las personas más vulnerables, que han cargado con las peores consecuencias en un “shock sin precedentes” en el archipiélago especialmente en las familias con niños, mujeres, inmigrantes y jóvenes, ha detallado Daniel Rodríguez de Blas, técnico de la Fundación Foessa y coordinador del informe. EFE