La consejera de Turismo y Empleo, Jessica de León, ha liderado una reunión este miércoles con representantes de la patronal hotelera y extrahotelera de la provincia de Santa Cruz de Tenerife (Ashotel), organizaciones sindicales, cabildos insulares y el cónsul de Alemania en España, Ralf Reuter. Este encuentro tuvo como objetivo delinear una estrategia conjunta para mitigar los efectos de la quiebra de FTI en el sector turístico canario.
De León expresó su preocupación por la posible reducción de conectividad con las islas, debido a la cancelación de plazas bloqueadas con aerolíneas como Condor y Germanwings, lo que podría traducirse en una disminución del 5% en la disponibilidad de vuelos al finalizar el año. Para contrarrestar esta situación, se fortalecerá la promoción en Alemania, mercado clave para el turismo canario, con el objetivo de mantener el número de plazas aéreas al nivel de 2019.
Apoyo a los trabajadores y empresas
Aunque los 1.500 trabajadores directos afectados por la quiebra de FTI en las islas están al día con sus nóminas, el Servicio Canario de Empleo (SCE) está listo para implementar ayudas en caso de despidos. De León subrayó que no se espera un escenario de despidos masivos, recordando que en situaciones anteriores, como la quiebra de Thomas Cook, se destinaron dos millones de euros para apoyar a los afectados.
La consejera enfatizó que, aunque la situación actual con FTI no es tan grave como la vivida con Thomas Cook, es fundamental mantener un enfoque proactivo y colaborativo para garantizar la estabilidad del sector turístico, vital para la economía de Canarias.
Impacto económico y social
La quiebra del turoperador alemán FTI, el tercero más grande de Europa, afecta a unos 40.000 turistas que ya tenían comprometidos sus viajes y a 1.500 empleos directos en Canarias, según una primera aproximación de daños económicos realizada por CEOE-Tenerife. FTI Group, que cuenta con una media de 500.000 turistas anuales en las islas y más de 50 hoteles propios y gestionados, tuvo un impacto económico de 800 millones de euros el año pasado.
El presidente de la patronal, Pedro Alfonso, ha señalado la necesidad de activar medidas adicionales, como la reactivación de los ERTE, la habilitación de una línea de créditos blandos y la exoneración del pago del IGIC de las facturas no cobradas, si fuera necesario. Alfonso ha reconocido que esta quiebra vuelve a poner en jaque al turismo canario, tras la crisis provocada por la quiebra de Thomas Cook y el cero turístico de la pandemia. Confía en que el volumen de mercado de FTI sea absorbido progresivamente por otras compañías.
¿Qué son los créditos blandos?
Los “créditos blandos” son préstamos ofrecidos en condiciones más favorables que los del mercado habitual. Estas condiciones incluyen tasas de interés más bajas, plazos de amortización más largos, períodos de gracia y requisitos de acceso más flexibles. Su objetivo es proporcionar apoyo financiero a empresas e individuos en situaciones de crisis, facilitando su liquidez y estabilidad.
El esfuerzo coordinado entre el Gobierno regional, las patronales turísticas y otros actores clave refleja la determinación de Canarias para superar este desafío y seguir siendo un destino turístico atractivo y competitivo.