La trágica situación vivida este domingo en la piscina natural de Isla Cangrejo, en Los Gigantes, continúa adquiriendo nuevas dimensiones conforme avanza la investigación del suceso que costó la vida a cuatro personas y mantiene desaparecida a una quinta. Las autoridades han confirmado que el enclave estaba precintado y vallado desde el viernes, cuando el Gobierno de Canarias activó la prealerta por fenómenos costeros adversos, con previsión de olas de entre dos y tres metros, especialmente peligrosas durante la pleamar.
Pese a la prohibición expresa de acceso, muchas personas, en su mayoría turistas, se saltaron el cierre, según explicó a EFE el alcalde de Santiago del Teide, Emilio Navarro, visiblemente consternado por lo ocurrido. El regidor detalló que en la entrada de la piscina natural hay carteles de advertencia en español, inglés y alemán, acompañados de imágenes que ilustran cómo el mar puede arrasar el recinto: “Información importante para su seguridad: zona peligrosa en situación de fuerte oleaje”. Aun así, alrededor de veinte personas —de distintas nacionalidades, incluidos turistas peninsulares— se encontraban en la zona cuando la enorme ola impactó pasadas las 16:00 horas del domingo.
Navarro explicó que la imprudencia suele repetirse en este enclave, ampliamente difundido en redes sociales por su atractivo visual: “Cada vez más gente, sobre todo turistas, no respetan la señalización al ver estos lugares promocionados en redes. Son sitios muy bonitos pero tienen el peligro que tienen y hay que respetarlo”, lamentó. Aunque el área estaba correctamente cerrada, algunas personas lograron acceder haciendo “palanca” o arrastrándose bajo las vallas.
El accidente tuvo lugar aproximadamente una hora después de la pleamar, momento en el que el mar alcanzaba mayor energía. “El mar empieza a advertir, se ponen al borde del muro, viene una olita, parece que no pasa nada… pero ocurre”, expresó con pesar el alcalde. Navarro ha felicitado a la Guardia Civil y a la Policía Local por sus esfuerzos constantes para mantener el precinto y retirar a quienes intentan entrar pese a las advertencias.
Los detalles del operativo y de las víctimas
Tras la alerta recibida a las 16:07 horas, se activó un amplio dispositivo con participación de un helicóptero y una embarcación de Salvamento Marítimo, un helicóptero del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES), varias ambulancias del SUC, socorristas con motos de agua, Bomberos de Tenerife, Guardia Civil y Policía Local.
Tres personas fueron rescatadas sin vida en el lugar. Una mujer, evacuada en estado crítico, falleció horas después en el hospital, elevando a cuatro el número de víctimas mortales. Entre los fallecidos se encuentran dos turistas rumanos y una mujer eslovaca, según datos comunicados por el alcalde, aunque aún sin confirmación oficial. Una quinta persona permanece desaparecida desde la tarde del domingo, pese a que continúa activa la búsqueda por mar y aire.
Además, una cuarta persona resultó herida de carácter moderado y fue trasladada al Hospiten Sur. Varios heridos leves fueron atendidos in situ por el SUC y socorristas.
Un precedente reciente
La tragedia golpea Tenerife apenas un mes después de otra jornada negra marcada por el oleaje, en la que tres personas fallecieron y quince resultaron heridas en distintos puntos de la isla, incluido el muelle de Puerto de la Cruz, donde una ola arrastró al mar a diez personas.
El Ayuntamiento de Santiago del Teide ha decretado tres días de luto oficial en memoria de las víctimas del suceso de Isla Cangrejo.
