El Cabildo de Fuerteventura ha ordenado la paralización inmediata de las obras de instalación de la planta fotovoltaica de 2 MW denominada ‘El Charco’, ubicada en Llanos de la Higuera, municipio de Tuineje.
La medida llega tras las quejas vecinales por la cercanía de la instalación a viviendas y la posterior inspección técnica, que constató que las obras —movimientos de tierra, colocación de paneles solares y vallado perimetral— afectan a la red de drenaje natural de la zona sin contar con la preceptiva autorización del Consejo Insular de Aguas (CIAF).
Este incumplimiento constituye una infracción administrativa y convierte a ‘El Charco’ en el primer parque fotovoltaico sancionado por la Corporación insular por este motivo. La paralización se mantendrá hasta que la empresa promotora regularice su situación y obtenga la autorización obligatoria.
«Las energías renovables son esenciales, pero deben implantarse respetando nuestro territorio y a la población», subrayó la presidenta insular, Lola García, quien defendió la necesidad de un modelo energético adaptado a la realidad de Fuerteventura.
La consejera de Ordenación del Territorio, Nereida Calero, insistió en que “avanzamos decididamente en el Plan Territorial Energético para garantizar que el desarrollo de las renovables sea compatible con el desarrollo económico y social, la protección del paisaje y el bienestar vecinal”.
Por su parte, el consejero del CIAF, Adargoma Hernández, recordó que “los informes del Consejo Insular de Aguas son vinculantes para cualquier proyecto de este tipo y no permitiremos atajos ni incumplimientos de la normativa”.




