El Muelle Chico de Corralejo se convirtió este sábado en escenario para la recuperación de la memoria literaria y social de Fuerteventura con la presentación de Isla de Lobos, Maloficio, Sed, una nueva edición que reúne tres novelas cortas del escritor, periodista y político José Rial (1888-1973).
El proyecto ha sido impulsado por Raúl Miranda López, quien propició y financió esta reedición, contando con la colaboración desinteresada del escritor majorero Marcos Hormiga. La iniciativa ha contado con el apoyo y coordinación del Cabildo de Fuerteventura y el Ayuntamiento de La Oliva, a través de sus áreas de Cultura.
El acto congregó a representantes institucionales y del ámbito cultural, entre ellos la presidenta del Cabildo, Lola García; el consejero de Cultura, Rayco León; el concejal de Cultura de La Oliva, David Hernández; el presidente de la Fundación Juan Negrín, José Medina, y el historiador Néstor Hernández, responsable del prólogo de esta edición.

El impulso para esta reedición nació tras la visita de Miranda y Hormiga a la exposición José Rial (1888-1973): Lucha, compromiso y reconstrucción, organizada por la Fundación Juan Negrín, entidad que conserva el archivo documental del autor.
«José Rial fue mucho más que un escritor; fue un hombre comprometido con la justicia social y un aliado de los pescadores majoreros», afirmó Lola García, quien subrayó la importancia de “rescatar y visibilizar su figura como parte de nuestro patrimonio cultural”. En la misma línea, Rayco León destacó que “su trayectoria vital y literaria está estrechamente vinculada a la memoria colectiva de Fuerteventura”.
El alcalde de La Oliva, Isaí Blanco, y el concejal de Cultura, David Hernández, coincidieron en resaltar la relevancia de iniciativas como esta para preservar la historia local y transmitirla a nuevas generaciones.

Un legado literario con raíz majorera
José Antonio Rial Vázquez, nacido en Filipinas en 1888 y fallecido en Santa Cruz de Tenerife en 1973, vivió tres años en el Islote de Lobos como torrero del faro Martiño (1913-1916), experiencia que marcaría su obra y su compromiso social con los pescadores de Fuerteventura.
Su paso por la Isla inspiró la fundación de pósitos de pescadores en Corralejo y Gran Tarajal, mejorando la vida de muchas familias mediante la educación, asistencia sanitaria y comercio justo de sus capturas. Sus tres novelas —Isla de Lobos, Maloficio y Sed— recogen esa realidad, denunciando la pobreza, el caciquismo y resaltando la resistencia de los majoreros frente a la adversidad.
Como periodista y redactor jefe de La Provincia entre 1927 y 1930, Rial defendió la proyección de Fuerteventura y sus problemas más allá del Archipiélago, destacándose como una voz comprometida con la transformación social.
«No se conoce ninguna otra obra literaria publicada que contenga tantas referencias a la Fuerteventura de principios del siglo XX», señala Néstor Hernández en el prólogo de esta edición, destacando que “es de justicia que, casi cien años después de su exilio y olvido, su labor reciba el reconocimiento merecido”.




