La posible implantación de una ecotasa en los espacios naturales más emblemáticos de Fuerteventura ha ganado impulso tras el respaldo explícito del Consejo de Participación de la Reserva de la Biosfera de la isla. En su última sesión, el órgano expresó su apoyo a las acciones encaminadas a establecer un modelo de tasa ambiental en lugares como los parques naturales de Cofete, Corralejo, la isla de Lobos y el monumento natural de Ajuy.
La iniciativa, basada en el principio de «quien contamina, paga», busca responder al creciente impacto del turismo en áreas sensibles de la isla. Estas tasas, aplicadas en otras regiones del mundo, tienen como fin desincentivar prácticas perjudiciales para el medioambiente y generar recursos para la conservación de la biodiversidad y el paisaje insular.
La consejera de Turismo y de la Reserva de la Biosfera del Cabildo majorero, Marlene Figueroa, dio la bienvenida a los nuevos integrantes del Consejo de Participación, un órgano que ha sido ampliado para incluir una representación más amplia del tejido asociativo majorero. Figueroa agradeció el compromiso colectivo en favor de la sostenibilidad e instó a seguir trabajando “por el equilibrio entre la naturaleza y el bienestar de la sociedad insular”.
Entre las entidades representadas se encuentran organizaciones medioambientales como la Federación Arena y Laurisilva, Fundación Chekipa, SOS Fuerteventura, Agonane-Ben Magec-Ecologistas en Acción y asociaciones como Avantfuer, Calderones Grises, la Asociación de Turismo Activo o la Cámara de Comercio de Fuerteventura, entre muchas otras. También se contempla la futura incorporación de cofradías de pescadores y colectivos vecinales.
Además del respaldo a la ecotasa, el Consejo manifestó su apoyo a la propuesta de declarar como Parque Nacional una zona representativa de Zonas Áridas y la Costa Atlántica de la Macaronesia, al tiempo que urgió a restaurar flora autóctona, con especial atención al Cardonal de Jandía y los endemismos del Pico de la Zarza.
La Reserva de la Biosfera de Fuerteventura trabaja actualmente en la actualización de su Plan de Acción en coordinación con otras reservas de Canarias y España, con el objetivo de establecer líneas estratégicas que refuercen la sostenibilidad del modelo turístico y económico insular.




