El pasado 24 de junio, Rosa González, de 58 años de edad vecina de Gran Tarajal, se despertó sin poder mover los músculos de la parte derecha del rostro. Con la boca torcida y un ojo casi cerrado acudió al centro médico de la localidad y desde allí fue derivada al servicio de Urgencias del Hospital General de Fuerteventura. Le prescribieron una medicación basada en corticoides y colirio para el ojo afectado por la falta de movilidad e indicaron varios ejercicios a realizar para tratar de recuperar el movimiento. Así la mandaron a casa.
Sin cambios, a los días volvía al centro sanitario de la localidad donde las instrucciones fueron no realizar ejercicios faciales y le instaron a hacerse un análisis de sangre. El pasado 4 de julio, y a pesar de sus circunstancias, le anularon la cita con el neurólogo que había solicitado previamente.
La situación de Rosa fue empeorando y también su malestar por la falta de atención por parte de profesionales especializados, denunció en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular.
Rosa González anunció que luchará por ser atendida “después de muchos años pagando la seguridad social, pido atención que esto no es un dolor de cabeza”, criticó. Así animó a la ciudadanía a hacer públicos casos como éste para poder conseguir mejoras en la sanidad pública.
La intervención de Rosa en Radio Insular, en el siguiente enlace.