Unas 40 esculturas tiene ya repartidas por Fuerteventura, casi nada. El escultor majorero Juan Miguel Cubas no para. Si no está con la radial en un Simposio, lo está coordinando, o preparando una obra homenaje para el Festival de Cometas -recientemente inaugurada- o viajando a Francia para levantar una escultura coral con otros dos artistas por los 80 años del Desembarco de Normandía.
No es la primera escultura que el artista realiza en Francia. De hecho, ya se puede seguir el rastro del majorero por distintos países de Europa. Parece que la isla se le queda pequeña.
En esta ocasión, trabaja de la mano con el escultor leonés Amancio González y el hispano-francés Xavier González. Ambos han dejado ya su impronta también en Fuerteventura. Amancio, que recientemente ha sido nombrado leonés del año, cuenta en la isla con un nutrido conjunto de obras que ha ido realizando a lo largo de los años. Xavier, por su parte, cuenta con dos esculturas fruto de distintos Simposios.
Ahora los tres dejan en Francia una nueva huella: una obra monumental en homenaje a la II Guerra Mundial, cocretamente a la Batalla de Normandía, una operación de los Aliados que culminó con la liberación de los territorios de Europa Occidental ocupados por la Alemania Nazi. Conocida en clave como «operación Overlord«, se convirtió en una victoria decisiva para el devenir del conflicto, y ahora este trío de ases, un majorero, un leonés y un hispano francés, levantan un homenaje en su honor.
