Fuerteventura ha sido una de las protagonistas en la última edición de los Soletes de Verano de la Guía Repsol, que este jueves ha anunciado los nuevos 260 establecimientos seleccionados por ofrecer una propuesta gastronómica auténtica, cercana y con personalidad. En esta ocasión, tres locales de la isla han sido reconocidos: The Return Gastrobar en Lajares, Olivo Corso en El Cotillo y El Invernadero en los Llanos Pelados, Puerto del Rosario.
Los Soletes de Verano nacieron con la intención de descubrir aquellos lugares con alma que, sin necesidad de grandes lujos ni precios desorbitados, conquistan por su ambiente, su producto local y la experiencia que ofrecen. En palabras de la directora de Guía Repsol, “este distintivo ayuda a descubrir sitios que no estaban en el radar, con la garantía de haber sido seleccionados por un equipo con criterio gastro y mirada local”.
En Fuerteventura, los tres establecimientos reconocidos destacan por su carácter singular. The Return Gastrobar, situado en el núcleo turístico y alternativo de Lajares, se ha hecho un nombre por su cocina de autor y su ambiente desenfadado. En El Cotillo, Olivo Corso aúna estética cuidada y una carta con guiños a la tradición local, mientras que El Invernadero ha conquistado a residentes y visitantes con una propuesta 100 % vegana, fresca, informal y comprometida con el entorno.
Esta duodécima edición de los Soletes reconoce en total a 15 locales en Canarias, y eleva a más de 5.000 los establecimientos distinguidos en toda España desde que se puso en marcha la iniciativa. En el caso de Fuerteventura, el reconocimiento supone un respaldo al sector hostelero local, cada vez más enfocado en ofrecer calidad sin perder identidad.
La selección de la Guía Repsol pone en valor la evolución de la oferta gastronómica de Fuerteventura, que ha sabido adaptarse a los nuevos hábitos de consumo sin renunciar a su esencia. “El Solete es una forma de dar visibilidad a esos rincones que siempre recomiendas a los amigos”, señala el equipo editorial de la guía. Además de su impacto turístico, los Soletes permiten construir un mapa emocional del verano en España, en el que las islas Canarias, y especialmente Fuerteventura, vuelven a destacar por su capacidad de sorprender desde la cercanía.
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