Diecisiete años después de iniciarse el conflicto con el Ministerio para la Transición Ecológica, la cadena hotelera Riu ha comenzado esta semana la demolición de las cuatro suites ilegales construidas en la azotea del hotel Tres Islas, en pleno Parque Natural de las Dunas de Corralejo. La intervención culminará a finales de agosto y pondrá fin a un largo proceso de sanciones, requerimientos incumplidos y órdenes de restitución.
La escena del derribo no deja indiferente: la malla azul de obra, los sacos blancos y una grúa amarilla operando en la sexta planta de un edificio que convive desde hace décadas con el entorno protegido. Allí, en 2007, Riu construyó cuatro suites de lujo en la azotea como parte de unas obras inicialmente autorizadas como reformas de mantenimiento. En 2008, el Ministerio abrió un expediente por infracción grave y exigió su demolición al considerar que se había aumentado el volumen del inmueble sin autorización en dominio público marítimo-terrestre.
Aunque la cadena abonó las sanciones económicas, no acató la orden de restitución hasta este 2025. Los trabajos buscan restaurar la azotea conforme al diseño original. En total, más de 1.000 metros cuadrados de dominio público fueron ocupados indebidamente, según los informes técnicos.

La restauración del edificio se convierte así en el capítulo final de un largo enfrentamiento administrativo entre la cadena hotelera y el Estado.




