Fuerteventura vuelve a ser un destino de moda y son numerosos los turistas que aprovechan para visitar la Isla dejando una estampa cada vez más habitual en la principal puerta de entrada. El aeropuerto vuelve a ser testigo de largas colas de personas esperando la llegada de un taxi.
En muchas ocasiones esperan más de una hora, y no solo en el recinto aeroportuario sino también en el muelle de Corralejo y otros puntos habituales de acceso. Las críticas se centran en el sector del taxi y el presidente de la patronal turística de Fuerteventura, Antonio Hormiga, insta a los ayuntamientos a incrementar las licencias.
Parte del sector se defiende de las acusaciones y pide a los representantes de la cooperativa que den la cara y que argumenten por qué están ejerciendo como “lobby” e impidiendo que se habiliten las demandadas licencias.
Así lo expresaron este viernes los representantes de El taxi es para tod@s, Antonio Mengual, y el de la Asociación de Autónomos del Taxi de Fuerteventura, Antonio Pérez, en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular, donde también intervino Adivia.
Su gerente, Juan Placeres, fue más allá y recalcó que el tiempo de espera para una persona con movilidad reducida “es tres o cuatro veces mayor”.
A su juicio el problema se centra en que la intención del lobby “choca frontalmente con la ordenanza de accesibilidad de Puerto del Rosario aprobada en 2020”.
Saben que deben incrementar las licencias pero no están a favor de que todas las que se habiliten sean para vehículos adaptados. Para el lobby del taxi, recalcó, “los taxis adaptados son un coñazo”.
Por su parte, Antonio Mengual insistió en que el lobby “es minoritario…puede estar conformado por unas quince licencias de un total de 250 que puede haber en la Isla”.
Son, subrayó, “mercenarios que no creen en lo público”. Tienen fuerza porque “ocupan puestos de dirección….pero hoy en día la cooperativa está más fragmentada que nunca”.
Desde la Asociación de la Asociación de Autónomos del Taxi de Fuerteventura, Antonio Pérez, se apunta a que “la llave la tienen las instituciones…Hay un plan insular…y estudios que amparan la creación de nuevas paradas”. En esta línea, instó al alcalde portuense, Juan Jiménez, a “ser valiente” e impulsar la ordenanza municipal del taxi que ha quedado relegada.
También pidió no claudicar ante las “amenazas de parón que ha habido” porque el sector no va a parar, recalcó.
Para mejorar el servicio es imprescindible, concluyeron, cumplir con el Reglamento de Canarias de Transporte, aplicar las distintas ordenanzas aprobadas, mejorar el cuadrante de servicios “caótico y estresante” y habilitar nuevas licencias de taxi adaptado que redunden en el interés general de una Isla que debe dar respuesta a su ciudadanía y a los millones de turistas que la visitan.