Canarias sigue siendo una de las comunidades con mayor tasa de pobreza del país. Según el XV Informe El Estado de la Pobreza en España, elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN-ES), el 24,6% de la población del Archipiélago —algo más de 550.000 personas— vive en situación de pobreza, pese a la recuperación económica registrada en los últimos años.
El documento, publicado este jueves, destaca que aunque este indicador ha mejorado desde 2015 —cuando alcanzaba el 30,7%— la pobreza severa afecta todavía al 10,1% de la población, 0,4 puntos más que el año anterior. La pobreza infantil, por su parte, alcanza el 36,4%, una de las cifras más altas del país.
El informe fija el umbral de pobreza en una renta anual de 10.519 euros. En Canarias, la renta media se situó en 13.372 euros por persona y año, un 9,8% más que el ejercicio anterior, aunque el incremento de los precios ha reducido el poder adquisitivo real de los hogares.
Entre los indicadores más preocupantes figuran que el 45,4% de los canarios no puede permitirse una semana de vacaciones al año, el 10,3% no come carne o pescado al menos cada dos días, el 48,9% no puede afrontar gastos imprevistos y el 17,7% acumula retrasos en pagos. Además, un 6,9% no dispone de vehículo propio y un 14,5% no puede salir a comer fuera una vez por semana.
La EAPN advierte de una persistente “brecha norte-sur” en España. Mientras Asturias presenta una tasa de pobreza del 15,6%, Canarias alcanza el 24,6% y Murcia el 26%. Según el informe, sin las transferencias y ayudas sociales, las tres comunidades tendrían cifras de pobreza cercanas al 48%, pero el efecto de las prestaciones es desigual: en Asturias logran reducirla a la mitad, mientras que en Canarias el impacto es mucho menor.
El estudio subraya que el mero crecimiento económico no basta para reducir la desigualdad. Aunque el Producto Interior Bruto (PIB) ha aumentado y se ha creado empleo, la calidad del mercado laboral y el acceso a la vivienda siguen siendo factores determinantes. “El crecimiento económico no es suficiente para reducir la desigualdad; se necesita más inversión social y un sistema fiscal progresivo y justo”, advierte EAPN-ES.
La organización recuerda que en 2024 las prestaciones sociales evitaron que 11,1 millones de personas en España cayeran en la pobreza, pero su eficacia varía entre comunidades. La desigual capacidad de los gobiernos regionales para invertir en cohesión social provoca, según la entidad, que regiones como Canarias continúen liderando los índices de exclusión.
El informe también apunta a la vivienda como uno de los factores que más agravan la pobreza. En Canarias, el gasto en alquiler se ha disparado un 68,1% en la última década, más del doble que el incremento del coste hipotecario (31,4%). Solo Baleares supera este incremento, con un 77,6%. Canarias, junto a Madrid, Cataluña y la Comunitat Valenciana, se sitúa entre las regiones con mayor porcentaje de población que destina más del 40% de su renta a la vivienda.
En conjunto, la EAPN concluye que el riesgo de pobreza y exclusión social en España afecta al 25,8% de la población —unos 12,5 millones de personas—, una cifra que apenas ha variado en la última década. Pese a los avances, “uno de cada cuatro españoles sigue en riesgo de pobreza”, y en comunidades como Canarias la vulnerabilidad continúa siendo estructural.




