Unos 250 autónomos se concentraron esta mañana frente a la Delegación del Gobierno de Canarias en Fuerteventura, en una protesta que forma parte de la movilización nacional del 30N, convocada simultáneamente en numerosas ciudades españolas. La manifestación, impulsada en la isla por la Asociación de Autónomos de Fuerteventura y Canarias, reunió a profesionales de sectores tan diversos como la hostelería, el comercio, el transporte, la construcción, los servicios, el arte y el pequeño emprendimiento.
La concentración estuvo marcada por un clima de indignación contenida y firmeza colectiva, con intervenciones que apelaron al cansancio acumulado por un sector que se siente “olvidado y desprotegido”. Los discursos, breves pero intensos, dibujaron una fotografía clara de la situación actual de los autónomos en la isla y en el conjunto del país.
“Llevamos demasiado tiempo sosteniendo en silencio lo que otros miran desde un despacho. ¡Basta ya! ¡Que ya está bueno! ¡Que miren hacia este lado!”, clamó uno de los portavoces entre aplausos de los asistentes. Otro participante defendió el espíritu del colectivo, subrayando que la resistencia ha sido la única constante frente a la precariedad: “Nosotros, autónomos, que luchamos sin escudos ni red, que sobrevivimos a las tempestades sin ayudas, nosotros somos la línea que no se rompe”.
Demandas claras y un mensaje de hartazgo
El manifiesto leído durante la concentración recogió las principales reivindicaciones del sector, muchas de ellas coincidentes con el documento nacional del 30N. Entre ellas destacan:
- Cuotas proporcionales ajustadas a los ingresos reales mensuales.
- Exención del IVA hasta los 85.000 euros conforme a la directiva europea.
- Fin del rol del autónomo como recaudador del Estado.
- Reforma del cese de actividad, para garantizar un paro “digno y real”.
- Sustituciones y bajas con cotizaciones reducidas, especialmente en casos de enfermedad o cuidado familiar.
- Protección social equivalente a la de cualquier trabajador asalariado.
- Simplificación real de las burocracias y eliminación del “lenguaje incomprensible”.
- Protección del patrimonio personal y del hogar familiar.
- Libertad de pago en efectivo, revisión de tarifas bancarias y competencia justa en medios de cobro.
- Deducción inmediata de inversiones y apoyo efectivo al emprendimiento y a la creación de empleo.
“Nos sentimos solos, nos sentimos maltratados, no tenemos los mismos derechos y sentimos que nos faltan a la dignidad. Nos tratan como si fuésemos nadie”, denunció otra de las portavoces, recordando además que los autónomos son “tejido económico y creadores de empleo”.
Un llamamiento a proteger el emprendimiento
Una de las intervenciones más emotivas estuvo dirigida a los jóvenes que dudan en emprender ante la incertidumbre económica: “Que no se les quite la ilusión… y que se les quite el miedo de emprender. Por eso necesitamos apoyo, para que los jóvenes que hoy tienen miedo se atrevan”.
El mensaje final fue de unidad y continuidad: “Esto no ha hecho nada más que comenzar… vamos a ir cogiendo fuerza y vamos a defender los derechos de los autónomos de Fuerteventura, de Canarias y de toda España”.
Un movimiento que crece
La concentración de este domingo se produce en un contexto de movilización creciente en Fuerteventura, donde la recién creada Asociación de Autónomos de Fuerteventura y Canarias ha impulsado en las últimas semanas acciones como la “huelga de TPV” y el desarrollo de una estructura organizativa propia, con miles de participantes repartidos entre grupos de WhatsApp y canales digitales.
Tras semanas de debate interno y de organización ciudadana en la isla, la manifestación de este domingo ha sido, para muchos, la primera demostración pública de fuerza del movimiento autónomo majorero, que asegura que seguirá activo mientras, dicen, “no se garantice una vida laboral digna y justa para quienes sostienen su propio empleo”.







