En un operativo reciente, los guardacostas de Mauritania interceptaron un cayuco que transportaba a 113 migrantes con destino a las Islas Canarias. Este suceso fue comunicado por el Ministerio de Pesca de Mauritania, subrayando la creciente presión migratoria en la región.
El martes, el grupo fue detenido en aguas mauritanas, aunque el comunicado no especifica el lugar exacto de la interceptación. La embarcación partió de Senegal el pasado jueves, pero las adversas condiciones meteorológicas y una avería en los motores forzaron a los migrantes a desviarse hacia la costa.
Entre los pasajeros del cayuco se encontraban 72 senegaleses, de los cuales tres eran mujeres, 33 guineanos entre los que había diez mujeres, siete gambianos y un sierraleonés. Este variado grupo de personas intentaba alcanzar las costas canarias en busca de un futuro mejor.
Política de repatriación
El comunicado del Ministerio de Pesca destacó que, en situaciones similares, los migrantes interceptados suelen ser repatriados a sus países de origen. Sin embargo, aquellos involucrados en redes de migración ilegal podrían enfrentar procesos judiciales en Mauritania, lo que añade una capa de complejidad a la situación de muchos de estos migrantes.
Precedentes recientes
No es la primera vez que los guardacostas mauritanos se enfrentan a una situación similar. El martes anterior, rescataron a otro grupo de 223 migrantes indocumentados cerca del puerto de Tanit, aproximadamente a 60 kilómetros al norte de Nuakchot. Estos incidentes reflejan el constante flujo migratorio que afecta a la región y la continua labor de las autoridades para gestionarlo.
Las Islas Canarias, por su proximidad al continente africano, se han convertido en un destino frecuente para aquellos que buscan una nueva vida en Europa. Sin embargo, el viaje es peligroso y a menudo plagado de dificultades, como lo demuestran los recientes incidentes interceptados por las autoridades mauritanas.
Problemon tiene canarias con tanto ilegal