El pasado 5 de enero, la llegada de los Reyes Magos a Tuineje generó sorpresa y descontento entre los vecinos del municipio. En lugar del tradicional desfile con camellos, los Reyes arribaron a Gran Tarajal sobre una plancha y en descapotables en el casco del municipio, rompiendo con la tradición y generando una oleada de críticas por parte de la comunidad. Para muchos, este cambio no solo restó magia al evento, sino que evidenció una falta de planificación y compromiso con las festividades más esperadas del año.
Desde el Partido Popular, la portavoz Esther Hernández calificó la celebración como “deslucida, poco imaginativa y muy alejada del espíritu de la Navidad”. Según Hernández, “la escasa programación y la ausencia de eventos que animaran las calles han dejado a Tuineje sin la magia que estas fechas deben transmitir. La mínima decoración navideña y la falta de actividades culturales y de ocio son un reflejo del desinterés del Ayuntamiento por fomentar el espíritu festivo y comunitario.”
A esto se suma la declaración de la concejala Nélida Padilla, quien lamentó la pérdida de una tradición tan arraigada: “Los Reyes Magos representan, además de la ilusión, la conexión con las tradiciones y la identidad cultural. En un municipio como Tuineje, es fundamental que estas festividades se respeten, especialmente cuando los niños más necesitan esa magia.” Padilla destacó que Tuineje ha sido el único municipio de la isla donde los camellos estuvieron ausentes, un hecho que considera una ruptura no solo con la tradición, sino también con la ciudadanía.
La celebración navideña en Tuineje, según el PP, quedó muy por detrás de otros municipios de Fuerteventura en cuanto a calidad y alcance. Los populares instan al Ayuntamiento, gobernado por CC y PSOE, a tomar medidas para que en próximas ediciones se recupere el espíritu navideño, devolviendo a los vecinos la ilusión y el sentido de comunidad que debería marcar estas fechas.