El alquiler en agosto en primera línea de playa ha moderado su subida al 3,7 % situándose en 1.055 euros a la semana de media, según los datos de la tasadora Tecnitasa.
En concreto, el incremento medio de este año es de menos de 40 euros a la semana, pasando de los 1.016 euros del año a los mencionados 1.055 euros.
Con todo ello, la media nacional del alquiler en costa ha crecido un 3,75 % este año, pero desde la pandemia ha subido más de un 27 % desde los 826 euros que marcaba en 2020.
Por comunidades autónomas, las que más han incrementado sus precios son las Islas Baleares y las Islas Canarias, que duplican la media nacional conjuntamente con Galicia y el País Vasco.
Andalucía, Asturias y la Comunidad Valenciana han elevado sus alquileres en agosto entre un 3 y un 6 %, mientras que los más moderados son Murcia, Cantabria y Cataluña, con un 3 % de subida.
En el litoral catalán, donde el año pasado sus tres provincias incrementaron los precios a doble dígito, en este 2023 de media presentan incrementos muy reducidos o planos.
En línea contraria está la isla de Tenerife, que el año pasado estaba a la cola de los incrementos con poco más del 3 % de subida y este año los duplica.
Se pueden pagar desde 3.000 euros a la semana por lo más caro hasta 350 euros por las vacaciones más asequibles.
Los precios más caros en primera línea de playa se encuentran en Marbella, en Puerto Banús, por 3.000 euros/semana; en Pontevedra, en Illa a Toxa, con 2.900 euros/semana; en Sanxenxo con 2.200 euros; en Santanyi en Portocolom con 3.000 euros o en Puerto de Ibiza, con 2.900 euros a la semana. EFE