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Las pasarelas de embarque del Aeropuerto de Fuerteventura, esa primera impresión que los turistas se llevan al aterrizar en la isla, han sido objeto de críticas durante años. Con evidentes signos de corrosión y óxido, la falta de inversión las había convertido en un símbolo del abandono de las infraestructuras aeroportuarias. Ahora, por fin, AENA ha adjudicado un contrato de 9,1 millones de euros a COMSA Corporación para modernizarlas.
El proyecto incluye la instalación de nueve nuevas pasarelas de embarque y la renovación de otras seis, además de la implementación de sistemas de guiado de atraque y mejoras en la climatización de las aeronaves. Estas obras buscan poner fin a una situación que, durante años, ha generado quejas tanto de pasajeros como de trabajadores del aeropuerto, que denunciaban el estado de las estructuras y la falta de mantenimiento adecuado.
Esta adjudicación forma parte de un lote mayor, en el que COMSA también llevará a cabo trabajos en los aeropuertos de Bilbao (6 millones de euros para la renovación de seis pasarelas) y Alicante-Elche (4 millones para la mejora de climatización de aeronaves y sistemas de guiado de atraque), sumando un total de 19 millones de euros en modernización aeroportuaria.
Con más de 130 años de experiencia en ingeniería y construcción, COMSA ha desarrollado proyectos en aeropuertos de todo el país, incluyendo actuaciones en Barcelona-El Prat y Madrid-Barajas. En 2024, cerró el ejercicio con una facturación de 987 millones de euros y ha trazado un nuevo plan estratégico para aumentar su rentabilidad en los próximos años.
Para Fuerteventura, esta inversión supone una mejora muy necesaria en sus infraestructuras turísticas. La imagen del aeropuerto es clave para el visitante y, hasta ahora, el deterioro de las pasarelas contrastaba con la calidad de un destino que vende sol, playa y paraíso.
