“Sorprendido”. Así se mostró el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Sergio Lloret, al conocer que el Partido Popular abandonaba el gobierno de la Isla tras el cese de los consejeros del grupo nacionalista y después de haber aprobado los presupuestos en el Consejo de Gobierno.
Una decisión que Lloret no esperaba, según desveló este lunes en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura, en Radio Insular, donde aseguró que el PP “se ha convertido en un verdadero apéndice de Coalición Canaria en una estrategia política conjunta bien definida”.
Para Lloret ha sido una “verdadera irresponsabilidad” abandonar la institución, a pesar de que había ofrecido a los populares gestionar áreas hasta entonces dependientes de Coalición Canaria. Y añade que “no asistir a los consejos también es una irresponsabilidad y más cuando cobras 3.200 euros líquidos de dinero público”
Las críticas fueron más allá al recordar que la candidata popular al Cabildo, Jéssica de León, había insistido sobre la necesidad de un quórum de 3 consejeros para convocar el Consejo de Gobierno.
A pesar de la advertencia que ellos mismos hicieron, recalcó el presidente, “los populares renunciaron con la intención de bloquear el Cabildo y el interés de los majoreros tiene que estar por encima”.
Para solventar las dudas jurídicas derivadas de la situación en manifiesta minoría del gobierno insular, la corporación encargó un informe a los servicios jurídicos de la corporación que, basándose en el reglamento de las grandes ciudades y los cabildos, según explicó, determinaron la existencia de máximos “pero no de mínimos”.
En cuanto al quórum, especificó, “basta con que, en la primera convocatoria, haya una mayoría absoluta del Consejo. Es decir, de dos consejeros, los dos….en segunda convocatoria, es cierto que tiene que tener un quórum mínimo de un tercio de los miembros del Consejo y en todo caso un número no inferior a tres, incluyendo la presidencia”. Es lo que indica el documento rubricado por la directora de la Asesoría Jurídica y Defensa en Juicio del Cabildo, María del Rosario Sarmiento.
De esta manera, recalcó Lloret, resulta válida una estructura de presidente y consejero secretario para hacer funcionar la institución, en lo que resta de gobierno, a través de la convocatoria de Consejos de gobierno y de plenos para los asuntos más trascendentales, a pesar de la denuncia contraria de la oposición.
Es cierto, reconoció, que si quedaran dos años de legislatura por delante, esta posibilidad sería prácticamente inviable.
El Cabildo, “a velocidad de crucero”
A pesar de contar únicamente con el presidente y un consejero en el gobierno, mientras que el resto, 21 consejeros, permanecen en la oposición, la institución puede seguir funcionando “perfectamente”, insistió Lloret, y. además, “con mayor velocidad, de crucero, porque no habrá nadie bloqueando acciones”.
Consciente de que los números posibilitan una moción de censura contra su persona -poco probable por la necesidad de la oposición de consensuar la figura de la presidencia y por la cercanía de elecciones-, Lloret aseguró que no le quita el sueño y confía en acabar la legislatura en el gobierno.
Un gobierno que se considera legitimado para dirigir “siempre en el objetivo de promover el desarrollo socioeconómico de Fuerteventura”, insistió.
Dreamland, sin impacto en el gobierno
Cuestionado sobre el impacto del inicio del procedimiento para declarar Dreamland de interés insular en el ámbito político, Lloret aseguró que “este proyecto no ha jugado ningún papel en la situación del gobierno actual ya que no formaba parte del pacto de gobierno”. Otra cosa es, recalcó, el uso que Coalición Canaria o el Partido Popular hagan del asunto.
En esta línea, criticó la estrategia política de la oposición e insistió en la idea de que no se ha determinado ningún suelo para la ubicación de la Ciudad del Cine y lo que se ha hecho es, recalcó, posibilitar el desarrollo del proyecto en la Isla.
Por eso, asegura no entender la denuncia efectuada por los ecologistas ante Fiscalía contra todos los consejeros que posibilitaron el inicio del procedimiento, incluido él mismo, ya que la denuncia “tendría que realizarse una vez aprobado un suelo concreto”, insistió.
Así, dijo no querer perder “este tipo de iniciativas para Fuerteventura” aunque, como majorero, insistió, “quiero que se haga en otro lugar”, distinto a la ubicación proyectada junto a las Dunas de Corralejo.
Para finalizar, Sergio Lloret mostró su confianza en que su partido, Asambleas Municipales de Fuerteventura, que concurrirá en alianza con Unidos Por Betancuria obtenga buen resultado en los próximos comicios y puso como ejemplo de gestión que Pájara, Betancuria y el propio Cabildo de Fuerteventura, “son las únicas corporaciones majoreras que han cumplido y han aprobado, antes de finalizar el año, los presupuestos para 2023”.