La diputada majorera Sandra Domínguez ha solicitado este jueves su baja del grupo de Nueva Canarias (NC) en el Parlamento de Canarias.
La presidenta insular de AMF pasa a ser una diputada no adscrita manteniendo sus derechos individuales como parlamentaria y podrá pertenecer a la comisión que determine la Mesa de la Cámara.
Esta decisión viene provocada tras las declaraciones ayer en primicia en Radio Insular de Alejandro Jorge de no renunciar a su acta de consejero en el Cabildo majorero, para no favorecer las presidencia de Sergio Lloret en el Cabildo de Fuerteventura en una previsible moción de censura contra Blas Acosta, que cuenta con la complicidad de CC y PP.
Sandra Domínguez, abogada de profesión encabezó la lista de Nueva Canarias (NC) al parlamento de Canarias en la isla de Fuerteventura, en las pasadas elecciones de mayo de 2019. Con una dilatada experiencia, ha sido senadora por Fuerteventura y portavoz en varias de las comisiones del Senado y concejala de Puerto del Rosario.
Tras anunciarse su candidatura, Domínguez agradecía por aquel entonces la confianza depositada en ella “por todos los compañeros de Nueva Canarias, AMF y Unidos por Betancuria” y declaró que “sobre todo, la unión de estas formaciones tiene como objetivo cambiar la manera de hacer política que tienen los representantes de Fuerteventura en todos los ámbitos”.
Sandra Domínguez también aseguraba firmemente que de logar la confianza de los votantes sería la parlamentaria que la isla de Fuerteventura necesita «para defender los intereses de nuestra tierra y de las personas que viven en ella, anteponiendo sus intereses a los intereses partidistas».
Este movimiento político de Sandra Domínguez podría facilitar una, cada vez más dudosa moción de censura en el Gobierno regional, y más, tras el anuncio de ayer de Casimiro Curbelo, de la Agrupación Socialistas Gomera, donde afirmó en la SER que no favorecerá ni intercederá en ninguna conversación para destronar al presidente Ángel Víctor Torres.
