Investigadores de la Universidad de La Laguna han realizado una excavación en el yacimiento de Tejate de Fuerteventura que ha aportado abundantes restos arqueozoológicos y de cerámica, entre otros, que apuntan hacia una ocupación aborigen puntual y no prolongada en el tiempo.
La intervención realizada en el pasado mes de mayo en el yacimiento de Tejate ha aportado un conjunto muy homogéneo de cultura material de los majos con abundantes restos arqueozoológicos, fragmentos de cerámica aborigen, restos líticos y malacológicos, ha informado la Universidad este lunes en una nota.
El yacimiento arqueológico de Tejate, ubicado en el municipio de la Oliva y al norte del Malpaís de la Arena, ha sido objeto de estos trabajos arqueológicos dirigidos por los investigadores de La Laguna Paloma Vidal y Salvador Pardo, junto al equipo de Arenisca, Arqueología y Patrimonio.
Este yacimiento, conocido por presentar una estructura de planta soliforme, alberga numerosas construcciones de planta circular y tubos volcánicos acondicionados tanto en su interior como en el exterior que forman unidades de asentamiento aborigen importantes.
Es precisamente en una de estas burbujas volcánicas donde se ha realizado la excavación arqueológica en el mes de mayo.
La excavación arqueológica de este tubo volcánico está enmarcada en el proyecto “Uso y gestión de recursos leñosos durante el periodo prehispánico y colonial en Canarias: adaptación e impacto humano en medios insulares”, financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación y dirigido por Paloma Vidal, del Departamento de Geografía e Historia de la Universidad de La Laguna.
La zona del Malpaís de la Arena presenta una riqueza arqueológica conocida gracias al inventario arqueológico insular y a los hallazgos casuales que continuamente se han producido en el lugar.
Sin embargo, no se habían acometido intervenciones arqueológicas previamente que permitieran encuadrar cronológicamente la ocupación aborigen de esta zona de la isla en los aproximadamente 1.500 años que ocupa el periodo prehispánico.
El objetivo de esta excavación arqueológica ha sido doble pues por un lado se ha tratado de obtener una secuencia arqueológica fiable con dataciones radiocarbónicas que aporten un marco temporal a la ocupación aborigen del Malpaís de la Arena y del norte de la isla.
Por otro lado, se intenta obtener una secuencia paleoambiental a través del análisis de los restos arqueobotánicos que permita comparar los datos con los de la vecina Cueva de Villaverde, donde el equipo de Arenisca, Arqueología y Patrimonio y Paloma Vidal desarrollan su investigación.
Uno de los elementos de mayor interés recuperado durante la excavación ha sido la documentación de lo que podría ser la preparación de un suelo durante la ocupación inicial de la cavidad o bien un nivel de estabulación, cuyos restos serán analizados y datados por Carbono 14 en las próximas semanas.
Además de obtener dataciones radiocarbónicas de la secuencia, se va a proceder a la flotación de todos los sedimentos en la Universidad de La Laguna para recuperar los restos de carbones, semillas y otros restos arqueológicos que serán analizados por el equipo que forma parte del proyecto. EFE