Las compañías aéreas han programado en los aeropuertos de Canarias 25,6 millones de asientos para la temporada de invierno, lo que supone un aumento del 20,4% respecto a los asientos de la temporada de invierno de 2019, antes del inicio de la pandemia.
En el mercado internacional, la oferta de asientos se incrementa en total un 28%, con más de 16,4 millones de plazas, mientras que en el mercado nacional, el incremento es del 8%, con más de 9,1 millones de asientos con destino entre aeropuertos españoles.
El número de movimientos programados también aumenta un 13%, con algo más de 172.600 operaciones comerciales. Y el número de rutas que las aerolíneas han proyectado en el archipiélago es de 812.
Por aeropuertos
Por número de plazas programadas, el Aeropuerto de Gran Canaria se sitúa a la cabeza, con 7,8 millones, un 18% más; le siguen Tenerife Sur, con 6,4 millones (+25%); César Manrique-Lanzarote, con 4 millones y un 31% más; Fuerteventura, con 3,4 millones (+33%); Tenerife Norte-Ciudad de La Laguna, 2,9 millones de asientos y un incremento de un 5%; La Palma, con más de 671.300 plazas, un 17% menos; El Hierro, con 151.700 (+3%); y por último La Gomera, con 48.384 asientos programados (+14,2%).
Después de España, los países donde las compañías aéreas han ofertado un mayor número de asientos para la temporada de invierno 2021 son Alemania, con 1,2 millones (+36%); Reino Unido, con más de 843.600 (34%); y Suecia, con 455.000 (+2%). Destaca el incremento de plazas ofertadas respecto al 2019 en el mercado italiano (+141%), belga (49%), holandés (+25%) y danés (+14%).
En el conjunto de aeropuertos españoles de Aena, las compañías han programado 108 millones de plazas para esta temporada de invierno, un 4,2% más que en la misma temporada de 2019.
Programación flexible y sujeta a cambios
Los datos generales para esta temporada de invierno 2021-2022 son positivos, pero el grado de incertidumbre sigue siendo elevado y la programación de asientos y movimientos siempre está sujeta a cambios por parte de las aerolíneas.
Además, se debe tener en cuenta que dicha programación responde a las peticiones realizadas por las compañías para operar en los aeropuertos y al número de asientos que ellas ofrecen a los pasajeros en estos vuelos. Por tanto, se trata de oferta de asientos y de vuelos, no de datos reales de tráfico, puesto que éstos no se obtienen hasta que los vuelos son operados y se conoce su ocupación.
En la temporada de invierno de 2019, las dos últimas semanas de marzo registraron ya una actividad muy reducida, lo que influye en las comparaciones para el conjunto.