La Policía Nacional ha detenido en Puerto del Rosario a un hombre de 62 años como presunto autor de un delito de tráfico de drogas. El arrestado, con numerosos antecedentes por delitos de robo con fuerza y contra la salud pública, fue interceptado tras una investigación iniciada el pasado 6 de septiembre, cuando agentes que realizaban labores de seguridad ciudadana notaron la actitud sospechosa del individuo dentro de su vehículo.
El hombre, al percatarse de la presencia policial, mostró un evidente nerviosismo y, antes de que los agentes pudieran proceder a su identificación, emprendió una fuga a toda velocidad. Pese a los intentos de la Policía por detenerlo en ese momento, el vehículo logró evadir a los agentes, lo que provocó la apertura de una investigación para localizar al sospechoso. Días más tarde, las autoridades lograron localizar el vehículo en un muelle del norte de la isla.
La operación culminó cuando se desplegó un dispositivo policial en el muelle, donde los agentes lograron detener al hombre, quien ofreció gran resistencia durante el arresto. Tras su detención, se procedió al registro del vehículo, encontrando tres paquetes sospechosos en su interior. Al inspeccionar los paquetes, los agentes comprobaron que contenían un total de 599 piezas rectangulares de una sustancia vegetal resinosa, de color marrón, identificada como polen de hachís, con un peso aproximado de 59.900 kilogramos. Los paquetes llevaban un dibujo de “Popeye”, lo que podría ser un signo distintivo relacionado con la organización criminal implicada.
Además, durante la operación, los agentes incautaron 675 euros en efectivo, fraccionados en billetes pequeños, presuntamente relacionados con la actividad delictiva del detenido. Una vez concluidas las diligencias policiales, el detenido fue puesto a disposición de la Autoridad Judicial competente, quien no dudó en decretar su ingreso inmediato en prisión preventiva a la espera de juicio.
Este arresto forma parte de los esfuerzos continuos de la Policía Nacional para combatir el tráfico de drogas en Fuerteventura, una actividad delictiva que sigue siendo una prioridad para las fuerzas de seguridad en la isla, con el fin de garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.