El Cabildo majorero ha finalizado las labores de acondicionamiento en el área recreativa de Castillo de Lara y Parra Medina, en el municipio de Betancuria, dirigidas a prevenir los procesos erosivos y sus consecuencias, especialmente la desertificación.
Con un periodo de ejecución de seis meses y una inversión de más de 1,2 millones de euros, las actuaciones fueron cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER), en el marco del Programa de Desarrollo (PDR) de Canarias.
Las actuaciones se promovieron desde las consejerías de Sostenibilidad y Gestión Medioambiental, que dirigieron los consejeros de Coalición Canaria, Lola García, y Pedro Martínez hasta su cese el pasado mes de diciembre, según han informado este lunes los propios nacionalistas en un comunicado.
Lola García ha advertido de que “el cambio climático ya se está produciendo y las administraciones y ciudadanía debemos actuar en conjunto para reducir la huella de carbono y mitigar sus efectos”.
De este modo, “las labores han consistido en la reforestación de 6.000 ejemplares de especies como retama, almácigo, cornical o romero marino, procedentes desde la Estación Biológica de La Oliva, especies totalmente adaptadas al clima y paisaje de Fuerteventura”, ha explicado García.
Para la protección de las especies, se ha mejorado el vallado del perímetro de la finca, con la colocación de más de 10.000 metros de valla, y se eliminaron las especies arbóreas muertas con desbroce y limpieza.
Se ha ejecutado también la rehabilitación de muros de piedra de las laderas y el lecho de los barrancos, la mayor parte en la zona de Parra Medina, elementos que contribuyen a frenar las aguas de escorrentía y la erosión del suelo.
Según Lola García, “el abandono agrícola de cultivos en bancales ha provocado la falta de mantenimiento de las cadenas de piedra, que eran elementos importantes para frenar el agua de lluvia”.
Por ello, lo que se ha promovido es “la rehabilitación de los muros de piedra que contribuyen a frenar los procesos erosivos, algo que es fundamental para conservar la productividad del territorio, permitiendo incluso mantener la recarga del acuífero subterráneo, dado que la erosión produce una menor capacidad de infiltración del agua”.
Por su parte, Pedro Martínez ha añadido que “son más de 1.000 metros de muros de piedra los que se han restaurado, con piedras a pie de muro y respetando el trazado y tamaño de los ya existentes”
Martínez ha destacado, también, el trabajo realizado en la pista de subida a Castillo de Lara, necesario para rehabilitar un camino que presentaba cierto estado de deterioro, con una inversión de 42.800 euros.
En el objetivo de frenar los efectos del cambio climático en Fuerteventura, se han llevado a cabo otras acciones por parte de las personas beneficiarias del Plan de Empleo para la Transición Ecológica (PETE) con restauración de muros de piedra en Vallebrón, Tiscamanita o Guisguey.
Asimismo, estos días se inician las actuaciones para mejorar el sendero que recorre el Parque Natural Islote de Lobos, con la instalación de una pasarela de madera en el tramo que rodea la zona cercana al saladar de Las Lagunitas, un área que se ve inundada con la subida de las mareas, dificultando el paso de los senderistas.
Esta actuación asciende a 144.744 euros y también es cofinanciada por el fondo FEADER y se dirige a garantizar la preservación de los ecosistemas como alternativa de paso para los senderistas cuando la zona se ve inundada. EFE