Tras los resultados arrojados por las urnas el pasado 28M, todo hacía presagiar un nuevo gobierno en Puerto del Rosario dirigido por el nacionalista David de Vera, con el presidente insular del PP, Fernando Enseñat, como primer teniente de alcalde.
El Partido Socialista era, esos días, un actor secundario que daba por hecho el pacto entre nacionalistas y populares, según reconocía este viernes, en una entrevista en el programa La Voz de Fuerteventura en Radio Insular el alcalde en funciones, Juan Jiménez. Sin embargo, “Fernando Enseñat contactó conmigo para hacer una propuesta que pasaría por una alternativa de gobierno a Coalición Canaria”, desveló.
Fue Fernando quien inició las conversaciones para buscar una alternativa a CC y convertirse en alcalde de Puerto, subrayó, explorando un acuerdo con los socialistas que precisaría del apoyo de Fuerteventura Avanza, toda vez que se proyectara a su lideresa, Peña Armas, fuera del arco local y ubicada en el Parlamento.
Alertado de las posibles conversaciones, el candidato nacionalista David de Vera contactó con el propio Enseñat quien le confirmó contactos con otras formaciones políticas.
A partir de ahí, el nacionalista se reunió con Jiménez quien le dio cuenta de la propuesta realizada por el presidente popular y “ante eso, que ya no es desconfianza sino deslealtad (al preacuerdo entre CC y PP) empezamos a tomar otras medidas que afectan a otros municipios”.
Así, en La Oliva y en Tuineje, que habían quedado fuera del preacuerdo por las desavenencias entre sus líderes posibilitando pactos entre PP y el PSOE, nacionalistas y socialistas también buscaron el encuentro para gobernar el Cabildo de Fuerteventura y cuatro municipios majoreros, dejando a los populares fuera del gobierno de todas las corporaciones majoreras. “Se creían con el derecho divino a gobernar”, manifestó Jiménez.
En todo el contexto también resulta clave un whatsapp remitido por el expresidente del Comité Local del PP de Antigua, Gustavo Berriel, al secretario general de los socialistas, Blas Acosta, proponiendo también un gobierno sin Coalición Canaria, con el apoyo de dos consejeras populares “fuera de la obediencia del partido”.
A pesar de que el PP trató de reconducir la situación, “poniendo sobre la mesa el acta de la alcaldesa de Tuineje, Esther Hernández, y la renuncia de Gustavo Berriel (presidente del Comité Local del PP de Antigua), como hizo ayer, es que existe claramente una deslealtad”, recalcó De Vera, y ya no hubo posibilidades de gobierno con el PP “porque el objetivo claro era lograr la estabilidad en las corporaciones”, concluyó De Vera.
