La situación de la dependencia en Canarias es “absolutamente escandalosa”. Son palabras de la directora de ACUFADE, Elena Felipe, en una entrevista en Radio Insular donde desveló que “en Canarias murieron 9 personas al día esperando en la lista de Dependencia, en 2020, sin disfrutar de los derechos que les reconoce el ordenamiento normativo”.
Recordó que tras promulgarse en 2006 la ley de Dependencia y constituirse tres años después el Observatorio de la Dependencia “Canarias apareció en el último lugar y, ahora, en el último informe emitido por este Observatorio a finales de 2020, Canarias continúa a la cola”, lamentó.
Felipe quiso, en este punto, felicitar la labor del diputado del Común, Rafael Yanes, “por la valentía con la que afronta una situación de injusticia social e incumplimiento claro de la norma”.
Cabe recordar que la Diputación está desarrollando un informe extraordinario para comparar datos con otras comunidades autónomas que dan respuesta, en el ámbito de la Dependencia, en 187 días de media mientras que en Canarias, la cifra está en 927.
Yanes ha propuesto, incluso, recalcó “que exista un sistema de sanciones para las administraciones incumplidoras porque lo que no es justo es que sea la propia administración la que esté haciendo un incumplimiento flagrante de la propia norma”, subrayó.
Abandono absoluto
Elena Felipe, se caracteriza por ser una de las voces más críticas con la gestión que el Ejecutivo de Canarias realizó durante el confinamiento denunciando “el abandono al que se sometió a todas las familias con una suspensión unilateral de todos los servicios, sin alternativas, me parece que no es propio de la situación que nos está tocando vivir”.
A su juicio, se falló con las personas “extremadamente vulnerables, personas mayores que han luchado toda su vida y que en el momento en el que más necesitan de esos recursos que les reconoce la norma, y fallecen sin tener acceso a ellos”.
En esta línea, se dirigió a la clase política dirigente a la que instó a cumplir con la ley, desarrollar su labor con sensibilidad y coherencia y poner a las personas en el centro de su acción. La dependencia, recalcó, “es un área que no se ha desarrollado porque no es una prioridad en las agendas públicas”.
Una pandemia llamada Alzheimer
En relación a la situación de las personas con alzheimer y otras demencias, Felipe requirió un gran pacto de Estado porque trasciende muchos ámbitos. Se deben abordar, indicó, “el área social, urbanística, sanitaria….impulsar vías administrativas legales para las familias, principalmente para las mujeres que en su mayoría llevan el peso del cuidado, para que puedan tener acceso a recursos dignos que les permitan seguir cuidando”, destacó.
Recordó también que los datos indican que a partir de los 65 años de edad entre un 5% y un 10% padece deterioro cognitivo. Un porcentaje que se eleva al 50% en las personas mayores de 80 años de edad aunque muchos estén sin diagnosticar, “se habla de una pandemia”, concluyó.