Las instalaciones convertirán la isla en referente nacional de consolidación de razas autóctonas para la mejora de las explotaciones ganaderas
El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca que dirige David de Vera, apoyará con 150.000 euros el proyecto que impulsa la Asociación de Criadores de Cabra de Fuerteventura para la creación de un centro de sementales de la raza majorera en las proximidades de la localidad de Tefía, en el municipio de Puerto del Rosario. Con esta iniciativa, la asociación promueve la mejora, tanto genética como sanitaria, de las explotaciones ganaderas, lo que repercute en el bienestar y la calidad del ganado caprino.
Así lo comunicaron el presidente del Cabildo, Sergio Lloret López, y el consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca, David de Vera, en una visita realizada ayer jueves, día 8 de julio, al lugar donde se emplazará este centro de inseminación artificial.
El presidente Sergio Lloret López destacó la importancia que tendrá este proyecto, ‘que será un centro de referencia a nivel nacional y contribuirá a la preservación de las razas autóctonas y a la mejora del sector’.
Por su parte, el consejero David de Vera avanzó los detalles del convenio que se suscribirá para financiar la puesta en marcha estas instalaciones y los gastos de funcionamiento. Para el consejero insular, ‘es fundamental apoyar desde las instituciones este proyecto que convertirá a Fuerteventura en referente en el estudio y consolidación del patrón racial de la cabra majorera, así como la inseminación artificial y la comercialización de genética’.
El presidente de la asociación, Iriome Perdomo, explicó que el centro contará con animales procedentes de los diferentes núcleos de selección de Fuerteventura, con un excelente estado sanitario. El proyecto cuenta también con financiación de la Dirección General de Ganadería del Gobierno de Canarias y del ayuntamiento de Puerto del Rosario. Además de la optimización genética, las explotaciones ganaderas mejorarán desde el punto de vista sanitario, ya que mediante el uso de la inseminación artificial se evita la propagación de enfermedades relacionadas con la reproducción y la entrada de agentes infecciosos.