Alejandro Jorge baja a la calle: diálogo in situ con vecinos y propietarios durante la manifestación del sur

 

 

 

La unión vecinal El Sur Despierta reunió esta mañana a medio centenar de vecinos en una manifestación que partió desde La Lajita y culminó frente al Ayuntamiento de Pájara. La movilización, pacífica y sin incidentes reseñables, buscaba denunciar el deterioro de Costa Calma y exigir un plan de choque municipal en ámbitos como el agua, la sanidad, el alumbrado, el palmeral, la vivienda y la gestión urbanística.

Los portavoces vecinales coincidieron en que la situación “ha llegado a un límite insostenible”. “Pedimos soluciones, en este día histórico el pueblo clama. El precio del agua es discriminatorio, pagamos el doble que el resto del municipio”, señaló José Manuel Gómez, de la unión vecinal, quien reclamó, además, mejoras en la atención sanitaria: “Queremos urgencias, queremos no un consultorio sino un centro de salud con atención todos los días y todas las horas”.

También denunció el deterioro de infraestructuras básicas: “Las aceras están deterioradas, las alcantarillas rotas, hay peligros y accidentes a diario”, indicó, y añadió que la iluminación nocturna es tan deficiente que muchos vecinos “tenemos que caminar por las noches con la linterna del móvil”.

Un gesto inesperado: el alcalde baja a la calle a escuchar a los vecinos

Uno de los momentos más relevantes de la jornada se produjo cuando el alcalde de Pájara, Alejandro Jorge, salió de la Casa Consistorial para mantener un diálogo directo con los manifestantes. La presencia del regidor no estaba prevista y sorprendió a los asistentes.

 

Durante el intercambio, Jorge aseguró que el Ayuntamiento nunca ha rechazado reunirse con los vecinos ni con particulares del Plan Parcial: “Hace meses que hemos dicho que estamos dispuestos a reunirnos con los propietarios de La Lajita. Ahora, si me piden una reunión con una cooperación [Junta de Compensación], yo no me voy a ir”, explicó el alcalde, argumentando límites legales en la forma de solicitar los encuentros.

Ante él, los convocantes negaron rotundamente los rumores que señalaban financiación externa o intereses ocultos detrás de la movilización: “Toda esta manifestación la pagamos de nuestro bolsillo”, respondieron, insistiendo en que la protesta no responde a ningún interés empresarial.

El bloqueo urbanístico del Plan Parcial La Lajita 2000, en el centro del debate

Entre los participantes destacó Miguel Macías, portavoz de los propietarios del Plan Parcial La Lajita 2000, quien —según él mismo explicó— representa al 77 % de los titulares del suelo. Macías fue especialmente crítico con la gestión municipal: “Todo está bloqueado hasta 2035… por la inacción de reunirse con nosotros”, afirmó, asegurando que el parón afecta al futuro CAE del sur, al instituto previsto para La Lajita, a las viviendas proyectadas y a las zonas comerciales. Añadió además: “El suelo es nuestro y nosotros haremos con nuestro suelo lo que tenemos que hacer. No lo que nos obligue un concejal inepto, ni al alcalde tampoco”.

Macías también contradijo la versión municipal sobre la cesión del suelo al Gobierno de Canarias, afirmando: “El CAE no está cedido; lo tengo acreditado”. Durante la conversación con el alcalde, Macías anunció que él mismo convocará una reunión formal con todos los propietarios del Plan Parcial, e invitó al Ayuntamiento a acudir:
“Yo voy a convocar a los propietarios…” declaró, abriendo la puerta a un encuentro que considera “imprescindible para desbloquear el futuro del sur”.

Indignación vecinal: impuestos sin retorno y abandono prolongado

Una vecina de Costa Calma tomó la palabra para denunciar la falta de inversión municipal:
“Pedimos que nuestros impuestos se reinviertan en nuestra localidad. Llevamos mucho tiempo solicitando mejoras y no hay respuesta”. Los asistentes insistieron en que Costa Calma sufre problemas continuados de limpieza, residuos, seguridad, mantenimiento del palmeral y deterioro de viales que afectan tanto a residentes como a visitantes.

Jorge pide calma y asegura que “los avances se verán en los próximos meses”

Tras escuchar las quejas de medio centenar de vecinos y propietarios, el alcalde de Pájara, Alejandro Jorge, quiso enviar un mensaje de serenidad y confianza sobre el rumbo que, asegura, está tomando la gestión municipal. El regidor destacó que comprende la frustración acumulada en Costa Calma y defendió el derecho de la ciudadanía a manifestarse.

En sus palabras, “desde el Ayuntamiento de Pájara respetamos y comprendemos que decenas de vecinos y vecinas de Costa Calma se hayan manifestado por sus derechos y que ejerzan este derecho constitucional de reivindicar mejoras en la localidad”, señaló, destacando que Costa Calma es “una localidad preciosa y que merece todas las atenciones”. Recalcó que el grupo de gobierno está trabajando en actuaciones que, según afirmó, comenzarán a verse próximamente: “Tenemos la certeza de que vamos a responder adecuadamente de las acciones y las inversiones que merece esa localidad. Y lo veremos en los próximos meses”, dijo. Reconoció que el ritmo no ha sido el deseado, pero atribuyó los retrasos a cuestiones “jurídicas, técnicas, administrativas y económicas que ralentizan las acciones políticas”.

El alcalde insistió en que no existe desinterés por parte del Ayuntamiento, sino un proceso complejo que —afirmó— se está gestionando con rigor. “Agradecemos a todos aquellos que se reivindican con el objetivo claro de seguir mejorando el municipio”, añadió, subrayando que en los próximos meses se resolverán asuntos “que llevan años esperando una solución”. Concluyó trasladando un mensaje de compromiso institucional: “El palmeral lucirá como se merece y los vecinos y vecinas tendrán las atenciones que reclaman”, aseguró, comprometiéndose a avanzar “de forma pública y transparente” en las medidas necesarias para el bienestar de Costa Calma y del conjunto del municipio de Pájara.