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El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha anunciado una ofensiva político-jurídica para redefinir el acceso a la condición de residente en el archipiélago y limitar la compra de viviendas por parte de extranjeros no residentes, una medida que, de prosperar, podría marcar un antes y un después en el modelo territorial y residencial de islas como Fuerteventura, donde el encarecimiento del acceso a la vivienda se ha convertido en un problema estructural.
Durante su intervención en el Debate sobre el Estado de la Nacionalidad, Clavijo advirtió que el actual crecimiento demográfico no es compatible con una convivencia equilibrada ni con un desarrollo sostenible, y apeló a la necesidad de revisar la normativa estatal y comunitaria en base a la condición de Canarias como región ultraperiférica.
El Ejecutivo autonómico iniciará en abril las primeras acciones formales de esta estrategia en la Conferencia de Presidentes de las RUP, que se celebrará en la isla de Reunión, y en la Asamblea de la Comisión Islas en La Palma, donde se planteará la necesidad de establecer limitaciones en la adquisición de viviendas por parte de no residentes, tal y como ya se hace en otros territorios insulares de Europa.
Clavijo reconoció que el camino no será sencillo, pero insistió en que “otros territorios han logrado establecer estas normas y Canarias también debe poder hacerlo”, especialmente cuando el acceso a la vivienda comienza a expulsar población local en islas como Fuerteventura o Lanzarote.
Vivienda, migración, economía y sostenibilidad
El presidente también destacó los avances logrados en materia de vivienda, con la activación de más de 2.000 viviendas públicas, el impulso a la Reserva de Inversiones de Canarias para vivienda en alquiler asequible y la futura regulación del alquiler vacacional, medidas con gran repercusión en municipios tensionados como Puerto del Rosario o Pájara.
Asimismo, anunció un nuevo decreto para agilizar licencias urbanísticas y defendió el segundo paquete normativo que pretende ordenar de forma sostenible el uso turístico de las viviendas.
En cuanto al modelo turístico, Clavijo subrayó que el futuro pasa por una sostenibilidad social y medioambiental, defendiendo un mayor equilibrio entre los intereses económicos y las condiciones de vida de la población residente. Reiteró su llamamiento al sector empresarial para incrementar los salarios vinculados a la productividad.
En su discurso, también hizo referencia a la necesidad de garantizar más recursos para atender el fenómeno migratorio, especialmente en islas como Fuerteventura, que sostienen parte del esfuerzo del sistema de acogida sin suficiente apoyo estatal.
El presidente anunció además la creación de una Oficina de Prospectiva y Estrategia, que permitirá anticipar los retos estructurales del Archipiélago y diseñar respuestas innovadoras en áreas como la sostenibilidad, la innovación social o la cooperación con África.
Avances en sanidad, dependencia, educación y economía
Clavijo repasó los avances alcanzados en áreas clave como la reducción de listas de espera sanitarias, la mejora del sistema de dependencia, la bajada de ratios escolares, o la creación de empleo, con un descenso del paro al 11,9%, el dato más bajo desde 2008.
Subrayó también el récord de trabajadores autónomos, la bonificación del combustible en las islas no capitalinas y la activación de proyectos de energías renovables con participación local, especialmente relevantes para territorios como Fuerteventura, donde la transición energética es una prioridad insular.
