En las últimas 24 horas, 796 personas han sido rescatadas en aguas cercanas a El Hierro y Lanzarote, en un operativo sin descanso de Salvamento Marítimo. Estas personas, en su mayoría de origen subsahariano y magrebí, emprendieron un viaje desesperado a bordo de cayucos y lanchas neumáticas en busca de una vida mejor. Entre ellas se encuentran 99 mujeres y 40 menores, incluidos bebés que apenas han conocido otra realidad que la incertidumbre.
Los equipos de rescate han trabajado contrarreloj para garantizar la seguridad de todas las personas a bordo de las embarcaciones, muchas de las cuales presentaban signos de agotamiento y deshidratación tras varios días en el mar. Sin embargo, la llegada masiva ha vuelto a poner de manifiesto las limitaciones de los servicios humanitarios en Canarias, especialmente en islas pequeñas como El Hierro.
Entre los rescates más destacados, se encuentra el de un cayuco con 143 personas que llegó al puerto de La Restinga, en El Hierro, tras ser localizado por un pesquero. Entre los ocupantes viajaban 74 hombres, 47 mujeres y 22 menores, incluidos cuatro bebés, cuyos llantos rompían el silencio en la madrugada.
En Lanzarote, la madrugada comenzó con el rescate de una neumática a 66 kilómetros de la isla. A bordo viajaban 73 personas, entre ellas una mujer. Durante el regreso al puerto, la misma embarcación de Salvamento localizó otra lancha con 68 personas, incluidas tres mujeres y dos menores, quienes agradecieron emocionados la ayuda.
En el transcurso de la mañana y la tarde, El Hierro continuó siendo el epicentro de los rescates. Dos cayucos, cada uno con 75 ocupantes, fueron auxiliados en alta mar. Entre ellos, había ocho mujeres y tres menores, cuyos rostros reflejaban el miedo, pero también un profundo alivio al pisar tierra firme.
La tarde culminó con tres rescates más en aguas cercanas a El Hierro, realizados por la Guardamar Polimnia y la Salvamar Adhara. Uno de los cayucos transportaba 84 personas, entre las que se encontraban 13 mujeres y cuatro menores, quienes expresaron su gratitud a los rescatistas con gestos y palabras en varios idiomas.
En Lanzarote, el día cerró con la llegada de dos neumáticas rescatadas por la Guardamar Talía, que puso a salvo a 109 personas, entre ellas dos mujeres y dos menores.
La acumulación de rescates en tan poco tiempo ha desbordado los recursos disponibles. En Lanzarote, el Consorcio de Emergencias tuvo que habilitar colchones adicionales en las carpas del puerto de Arrecife para alojar temporalmente a los recién llegados. Mientras tanto, en El Hierro, el pequeño puerto de La Restinga se convirtió en un símbolo de esperanza para quienes lograron sobrevivir al cruce.
