- Coalición Canaria presenta alegaciones mostrando su inconformidad con su ubicación en un suelo de alto valor natural y paisajístico
- Mario Cabrera: “Los decretos de interés general o insular no pueden beneficiar a las grandes empresas a costa de nuestro territorio”
Coalición Canaria Fuerteventura ha presentado hasta ocho alegaciones al interés insular del Dreamland Studios, mostrando su inconformidad con la ubicación de este megaproyecto de iniciativa privada en una parcela rústica de 160.000 metros cuadrados colindante con el Parque Natural de las Dunas de Corralejo. Una zona ‘tampón’ de la Reserva de la Biosfera de alto valor paisajístico y hábitat de especies de aves en peligro de extinción.
El expediente del proyecto no aporta ningún motivo que justifique esta ubicación, más allá del puramente especulativo. No existe ninguna justificación ni demanda social para emplazar el Dreamland en esta área cercana a las Dunas de Corralejo. Además, en la Isla existen gran cantidad de suelos muchos más idóneos por sus accesos a servicios urbanísticos y cercanías a núcleos residenciales.
Como ya ha venido haciendo desde un principio, CC Fuerteventura vuelve a aclarar que no está en contra del Dreamland, pero sí de esta ubicación con altos valores naturales y paisajísticos. Para acometer este atropello, utilizan una vía extraordinaria y urgente, prevista para otras actuaciones estratégicas y prioritarias para el conjunto de la ciudadanía, con el único fin de comprar suelo a precio extremadamente barato y reclasificarlo.
Para el secretario general de CC Fuerteventura, Mario Cabrera, “los decretos de interés general o insular no pueden beneficiar a las grandes empresas a costa de nuestro territorio. En ese suelo no habrá Dreamland. Vemos como siguen empeñados en provocar a la población con una publicidad engañosa y este no es el camino para obtener una solución, sino que esta viene a través del consenso y el diálogo para buscar alternativas”.
Por su parte, Lola García explica que “una institución como el Cabildo de Fuerteventura no puede amparar actuaciones como ésta, que van en detrimento de la imagen de la Isla como Reserva de la Biosfera. No se puede llegar con la intención de llevar a cabo un megaproyecto industrial y comercial y no comprar el suelo adecuado para ello. No podemos ponernos un precio”.
Tampoco concurre necesidad sobrevenida del proyecto. Debe existir una necesidad real e inmediata, una demanda de la ciudadanía en general como puede ser la Residencia de Mayores de Gran Tarajal, un hospital de especializaciones o la Residencia Insular de Salud Mental. Ni siquiera el propio expediente del Dreamland recoge el carácter urgente del mismo.
Si bien es cierto que la actividad audiovisual es considerada como un sector estratégico, la propia ubicación del proyecto va en contra de esta idea, ya que nadie va a rodar películas y a visitar Fuerteventura si destruimos el paisaje y lo copamos de cemento.
Por todos estos motivos, y una vez presentadas las alegaciones, CC espera que sean admitidas y se declare de una vez por todas la ilegalidad urbanística del Dreamland Studios y, por tanto, su desaprobación como proyecto de interés insular.