Carolina Simón hablaba este martes sobre el pensamiento de segundo orden, que se ubica en el marco del pensamiento lógico y racional. Por lo tanto, funciona de la misma manera. Lo que le diferencia del pensamiento de primer orden es la proyección que alcanza. Mientras este último solo analiza el efecto inmediato de una acción, el de segundo orden evalúa el efecto del efecto.
Aunque este tipo de pensamiento se promueve sobre todo en el marco de la ciencia y en el mundo empresarial, lo cierto es que puede aplicarse a cualquier tipo de situación, incluyendo la vida personal. Es una forma de salir de los análisis simples y obvios, y de profundizar en la realidad.
La mayor ventaja del pensamiento de segundo orden es que permite ver la realidad en perspectiva. Esto conduce a ideas más interesantes, soluciones más eficaces y decisiones más sólidas. Exige un esfuerzo adicional, frente al pensamiento corriente, pero también ofrece más beneficios.