La colaboración entre las administraciones y organismos públicos, asociaciones, colectivos, centros turísticos y ciudadanía en general, es fundamental para la protección y conservación de esta especie silvestre
El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Medio Ambiente y Caza, que dirige Carlos Rodríguez, ha mantenido hoy una reunión de coordinación con los ayuntamientos de la isla sobre la campaña de protección de la pardela cenicienta de 2023, que se desarrolla anualmente desde el mes de septiembre hasta finales de noviembre.
En la reunión también estuvieron presentes agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), representantes del Servicio de Medio Ambiente y de Gesplan, la empresa encargada de la recogida de fauna accidentada.
La colaboración y coordinación de las medidas de protocolo entre las administraciones y organismos públicos, asociaciones, colectivos, centros turísticos y ciudadanía en general, es fundamental para la protección y conservación de las especies silvestres, más en esta época del año cuando salen todos los polluelos de pardela y otras aves marinas en busca del océano, desbordando el número de servicios para afrontar su recogida, supervisión y posterior liberación.
De acuerdo a lo establecido en la reunión, durante los meses de octubre y noviembre, es importante prescindir de todas las luminarias innecesarias en las zonas de exterior, sobre todo aquellas situadas cerca de la línea de costa. En caso de que estas fueran necesarias, por motivos de seguridad, es recomendable mitigar su intensidad, siempre y cuando lo permita su funcionalidad.
El consejero de Medio Ambiente, Carlos Rodríguez, señaló “La educación ambiental es crucial para sensibilizar a los ciudadanos sobre esta especie silvestre. Con conciencia y siguiendo las recomendaciones del Servicio de Medio Ambiente, podemos proteger su hábitat y garantizar su supervivencia”
¿Cómo actuar si encontramos una pardela en peligro?
El principal problema al que se enfrenta esta especie es que, durante estos meses, los pollos abandonan el nido, orientados por la luna, la contaminación lumínica de las zonas urbanas los deslumbra, desviándolos de su ruta, provocando choques contra farolas, tendidos eléctricos e incluso atropellos.
Por ello es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones: En primer lugar, se debe avisar al 112 para informar sobre la situación. Es importante que, aunque se observe que el ave se encuentra en buen estado, no hay que liberarlo, ya que el animal debe pasar primero por un control veterinario.
Además, es fundamental recogerla con mucho cuidado, especialmente con su pico. Para ello, se recomienda utilizar una toalla, sudadera o similar, para luego depositarla en una caja con la ventilación adecuada. Posteriormente, cerrar la caja y mantener al animal en un lugar tranquilo y a la sombra, hasta que pase el servicio de recogida de fauna. Además, es importante no suministrarle ningún tipo de alimento sólido o líquido.
Asimismo, es importante, recoger el dato de dónde fue encontrado el animal, ya sea durante la llamada de aviso, o en el momento de su recepción sobre la misma caja en la que hayamos podido poner a la pardela. Esta información es verdaderamente útil para gestionar la recogida de las pardelas, tratamiento de datos y puesta en libertad en una zona segura próxima al lugar de su procedencia.
En caso de encontrarse una pardela muerta, también es importante recoger los datos del lugar en que se encuentra, para detectar posibles zonas de mayor siniestralidad.