La Consejería de Obras Públicas, Transportes y Vivienda del Gobierno de Canarias, que dirige Sebastián Franquis, ha sacado este martes a licitación el contrato para la redacción del proyecto de construcción del nuevo tramo del Eje Norte-Sur de Fuerteventura que va desde el aeropuerto hasta el cruce de Pozo Negro, en el término municipal de Antigua.
Con una inversión de 1.132.862 euros para esta licitación, la Consejería impulsa la continuidad para la ejecución total del Eje Norte-Sur de carreteras de la Isla tras conceder en marzo pasado la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el cambio Climático y Planificación Territorial, la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable a este nuevo tramo.
Con esta licitación, Obras Públicas prepara la contratación de unas obras valoradas en algo más de 150 millones de euros para seguir ampliando la autovía que conforma el Eje Norte-Sur de Fuerteventura, en este caso, un tramo de 18 kilómetros que va desde el aeropuerto de la Isla hasta el cruce de Pozo Negro, en el término municipal de Antigua.
El proyecto de este nuevo tramo permitirá continuar la traza del Eje Norte-Sur de Fuerteventura en dirección sur una vez se ha finalizado y abierto ya el tramo Corralejo-Caldereta y se está ejecutando el de Caldereta-Aeropuerto. Por tanto, este tramo entre el Aeropuerto y Pozo Negro, cuya ejecución de obras se estima que pueda rondar los 150 millones de euros, sería la continuación a la carretera que está ejecutando en la actualidad la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Vivienda junto a Puerto del Rosario.
Este nuevo tramo de autovía tendrá un trazado de 18,1 kilómetros de longitud y contará con cuatro enlaces, el del aeropuerto, el Enlace de El Castillo, el Enlace de Las Salinas y el Enlace de Antigua. La nueva carretera realiza el mismo recorrido que la FV-2 actual, pero con menos kilómetros, con una calzada doble con cuatro carriles que permitirá circular a 120 kilómetros hora y, sobre todo, con un recorrido más respetuoso con el medio ambiente del entorno.
Precisamente, con el fin de preservar el hábitat natural de la fauna que frecuenta la zona del Barranco del Valle del Mirador, se ha incluido en el proyecto de esta obra la ejecución de un túnel de 1,3 kilómetros para no cortar con la traza de la carretera el paso de las aves silvestres que anidan por la zona.