La tasa de abandono escolar temprano ha vuelto a aumentar en Canarias en el último año, situándose en un preocupante 14,4 %, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) recogidos en un informe de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas). Este dato supone un repunte significativo frente al 13,1 % registrado en 2024 y deja al archipiélago por encima de la media nacional, que se sitúa actualmente en el 12,6 %.
Este incremento revierte parcialmente la mejora registrada el año anterior y refuerza la preocupación por el estancamiento de los avances educativos en la región. En el conjunto del Estado, la tendencia ha sido a la baja, pasando del 13,7 % en 2023 al 13 % en 2024 y al actual 12,6 %, aunque España sigue sin alcanzar el objetivo europeo del 9 % marcado para 2030.
El abandono escolar temprano se define como el porcentaje de jóvenes entre 18 y 24 años que no ha completado la educación secundaria de segunda etapa y que no sigue ningún tipo de formación. Según el análisis de Funcas, factores como el nivel educativo de las familias —especialmente el de las madres— son claves en este fenómeno. “Los jóvenes cuyas madres solo tienen estudios primarios presentan una probabilidad de abandono 14 veces mayor que aquellos con madres con estudios superiores”, señala el informe.
El experto en educación de Funcas, Ismael Sanz, ha advertido de que “España sigue siendo el segundo país con mayor abandono escolar de la UE, solo por detrás de Rumanía (16,8 %), y muy lejos de la media europea del 9,3 %”. Las diferencias territoriales son abismales: mientras en el País Vasco la tasa se sitúa en un 3,8 %, en Murcia alcanza un alarmante 20,6 %. Cantabria (6,1 %), Madrid (9,3 %) o Navarra (9,6 %) también destacan por sus buenos resultados.
En el caso canario, el repunte a un 14,4 % devuelve a la comunidad a cifras similares a las de 2023, cuando se situaba en el 14,7 %. Este dato contrasta con los avances registrados por comunidades como Andalucía, que ha reducido su abandono del 16,9 % en 2023 al 14,8 % en 2025, o Castilla y León, que mejora hasta alcanzar el 9,7 %.
Funcas subraya la necesidad de adoptar medidas efectivas para frenar el abandono temprano, como ratios más bajas en las aulas, tutorías personalizadas, incentivos para docentes experimentados en zonas vulnerables, así como una formación profesional más flexible y adaptada al mercado laboral. La Comisión Europea también ha advertido del impacto de la pandemia, que ha intensificado el absentismo entre el alumnado más desfavorecido y podría tener efectos duraderos en su inserción laboral.
La situación en Canarias, que en otros indicadores educativos como la comprensión lectora o los resultados de PISA también ha quedado rezagada respecto a la media nacional, exige una respuesta firme y estructural para garantizar la igualdad de oportunidades en el acceso y permanencia en el sistema educativo.
