La Policía Nacional ha detenido en Puerto del Rosario a una mujer de 38 años y a un hombre de 29, con múltiples antecedentes policiales, tras atrincherarse en su vivienda y utilizar a su bebé recién nacido como escudo humano para impedir la actuación de los agentes.
El incidente, ocurrido el pasado 30 de julio, comenzó cuando varios efectivos acudieron al domicilio de la capital majorera ante un aviso por una fuerte discusión de pareja. Al identificar a los implicados, comprobaron que el varón tenía en vigor varias reclamaciones judiciales, incluida una orden de ingreso en prisión por un delito de amenazas. En el interior del domicilio se encontraba también el recién nacido de ambos.
Según informó la Policía Nacional, la pareja se negó a colaborar, se atrincheró y reunió varias armas blancas de grandes dimensiones. Los sospechosos amenazaron con causar lesiones al menor si algún agente intentaba acceder a la vivienda. Ante la gravedad de la situación, se activó un dispositivo de intervención con agentes especializados y un funcionario “negociador” de la Jefatura Superior de Policía de Canarias.
La labor de estos efectivos permitió, tras tres horas de tensión, “crear un clima de confianza” que llevó a la pareja a deponer su actitud hostil y salir voluntariamente junto al bebé, que no sufrió lesiones aparentes. Posteriormente, ambos fueron detenidos y trasladados a dependencias policiales.
Una vez finalizadas las diligencias, el hombre ingresó de forma inmediata en prisión por orden judicial, mientras que la mujer quedó en libertad con cargos. El recién nacido fue derivado a un centro de protección.
Este suceso, de especial gravedad por el riesgo al que se expuso a un menor de apenas días de vida, ha sido calificado por la Policía como una intervención de alto riesgo que requirió coordinación, paciencia y especialización para evitar un desenlace trágico.




