Un vuelo procedente de Cardiff, Gales, obligó a activar este jueves un protocolo de seguridad en el aeropuerto de Lanzarote tras encontrarse una nota alarmante en uno de los aseos del avión. En el mensaje, un pasajero galés advertía de la supuesta presencia de una bomba a bordo.
El vuelo BY6422, operado por la aerolínea TUI, aterrizó alrededor de las 10:55 horas. Una vez en tierra, la tripulación notificó de inmediato la amenaza a las autoridades, lo que desencadenó una rápida respuesta por parte de la Guardia Civil.
Agentes especializados, incluidos los técnicos en desactivación de explosivos (TEDAX) y otros equipos de seguridad, se desplazaron hasta la aeronave para llevar a cabo una inspección exhaustiva. Finalmente, tras verificar que no existía ningún artefacto explosivo, se descartó cualquier riesgo para los ocupantes y para la operatividad del aeropuerto.
A pesar de la activación del protocolo de emergencia, el aeropuerto de Lanzarote recuperó la normalidad en poco tiempo, aunque algunas salidas sufrieron retrasos y cancelaciones temporales como medida preventiva.
La rápida actuación de la Guardia Civil permitió resolver la situación sin incidentes, garantizando la seguridad de los pasajeros, la tripulación y el personal de tierra. Por el momento, no se ha informado sobre posibles acciones legales contra el autor de la amenaza.
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